Hay una serie de razones por las que Apple parece haber cambiado de opinión sobre el lanzamiento de un iPhone USB-C. Sin embargo, una cosa que es difícil de pasar por alto es la legislación que se avecina en todo el mundo.
Después de varios años de idas y venidas, la Unión Europea llegó oficialmente a un acuerdo para un estándar de "puerto de carga común". A partir de 2024, todos los smartphones que se vendan en los 27 países de la UE estarán obligados a utilizar el USB-C para la carga. Esto incluye el iPhone e incluso accesorios periféricos como los AirPods.
Apenas unas semanas después de que la UE acordara su legislación, los legisladores de Estados Unidos manifestaron su apoyo. Muchos pidieron a Estados Unidos que aprobara algo similar. La senadora Elizabeth Warren renovó hoy este llamamiento diciendo que:
“Los consumidores no deberían tener que comprar siempre nuevos cargadores para distintos dispositivos. Podemos aclarar las cosas con normas uniformes, para que haya menos gastos, menos complicaciones y menos residuos”.
A principios de octubre, la legislación de la UE se adoptó formalmente tras una votación en pleno del Parlamento Europeo. La ley fue aprobada por una abrumadora mayoría, con 602 votos a favor, 13 en contra y 8 abstenciones. Según la ley, hay exenciones para los productos que son demasiado pequeños para ofrecer un puerto USB-C.
La legislación deberá ser aprobada por el Consejo Europeo y publicada en el Diario Oficial de la UE. Todos los productos que hayan salido a la venta antes quedarán exentos de este requisito, pero se espera que entre en vigor antes del lanzamiento del iPhone 16 en 2024.
Apple se ha opuesto a la legislación que haría obligatorio el uso del USB-C en el iPhone. La compañía argumenta que este tipo de leyes ahogan la innovación y en realidad conducen a más residuos ambientales.
El analista Ming-Chi Kuo predijo por primera vez en 2019 que Apple lanzaría un iPhone sin puerto tan pronto como en 2021, pero eso no se hizo realidad. Es fácil ver por qué: las tecnologías inalámbricas simplemente no son fiables o lo suficientemente potentes como para reemplazar completamente un conector como Lightning o USB-C. Las velocidades de carga no son tan rápidas, la transferencia de datos es lenta y poco fiable y la adopción por parte de los consumidores no está todavía ahí.
Un iPhone sin puerto está todavía en proceso de elaboración y es algo que se está probando internamente en Apple, pero no esperaríamos ver su lanzamiento al público este año o el próximo.